Oliverio Girondo > Autobiografía
Nací en Buenos Aires el 17 de Agosto de 1891. Aunque parezca increíble fui un niño hermoso y rubicundo. Cuando mis padres me llevaron al colegio, intenté suicidarme. En el Nacional me perfeccioné en el arte de las carambolas y de los manoseos. Durante mi primer viaje a Europa me internaron en un Colegio de Epsom para que mejorara "mi" inglés, al lado de unos viejos árboles y de una sirvienta deliciosa. Decidido a no sufrir ninguna coerción intelectual, ingresé en la Facultad de Derecho. Entre idas y vueltas a Europa -¡he vivido 567 días en el mar!- fundé con mis amigos de "La Púa" un pasquín inédito que se llamó "Comoedia". Varios artículos publicados en él y otros en "Plus Ultra" indican que convalecía “de” Barrés. (¡Qué olor a pomo y a gomina!). En un momento de verdadero extravío mental, arriesgué, con la complicidad de René Zapata Quesada, un intento teatral: La Madrastra, melodrama infecto y maeterlinckiano. Después, para redimirme, rompí papel durante varios años. Rompí papel en Edimburgo y en Sevilla, en Brujas y en Dakar, hasta que en 1922 publiqué algunos de los que se salvaron junto con diez hojas de mi "carnet" de croquis bajo el título de Veinte poemas para ser leídos en el tranvía.